El Evangelio Del Amor
Resumen del Libro

Hasta ahora, era en sus cronicas y en sus libros de viaje en los que yo habia saboreado los ritmos de su espiritu. Pero su naturaleza es de un caracter tan lirico, que hasta cuando pinta paisajes exoticos con pinceles que Emile Faguet encuentra superiores, en ciertos casos, a los de Pierre Loti, o cuando comenta los acontecimientos de la vida corriente, nos habla siempre de si mismo, de sus intimas melancolias, de sus entusiasmos, de sus amores, de sus ilusiones, de sus pesares, todo de una manera indirecta, pero transparente. Lo llaman en Espana y en la America espanola el Principe de los cronistas. Y lo es. Mas es un principe sin subditos, porque ninguno de los que caminan por senderos analogos al suyo, parece de su misma raza. Sin quererlo, y tal vez sin saberlo, ha creado su genero, mezclando en el sonrisas y exaltaciones, cordura y fantasia, matices y violencias, cultura e instituto, fervores e ironias, frivolidad y profundidad, todo ello envuelto y como velado en una forma exquisita, que comenzo por sorprender, casi puede decirse, por chocar, a los puristas, pero que ha acabado por seducir aun a aquellos que no juran si no por Cervantes. Es un escritor frances que se traduce a si mismo en castellano, solia decir su amigo Ruben Dario. Algo hay de esto, aunque en Francia tambien parece muy original y hasta raro, a pesar de su educacion literaria, puramente parisiense. Lo que podia parecer extrano, es que este artista perfecta, cuyas obras completas ocupan veinticinco volumenes, no hubiera aun escrito una verdadera novela, temiendo las dotes mas admirables para el cultivo de ese genero. Y me siento orgulloso de decir que quien descubrio primero tales dotes, fui yo. A menudo le decia: – Escriba usted novelas, que seran muy bellas. El me contestaba siempre: – Soy incapaz de imaginar la menor cosa. Afortunadamente se enganaba, como nos lo demuestra ahora el exito muy merecido de El Evangelio del Amor, obra de la cual lo unico que podran decir ciertos criticos, es…