La Equilibración De Las Estructuras Cognitivas
Resumen del Libro
Este nuevo volumen de los Études trata de explicar el desarrollo y la formación de los conocimientos recurriendo a un proceso central de equilibración. Piaget parte de una idea básica: los conocimientos no proceden ni de la sola experiencia de los objetos, ni de una programación innata preformada en el sujeto, sino de construcciones sucesivas con constantes elaboraciones de nuevas estructuras. Por diferentes que sean los fines perseguidos por la acción y el pensamiento (modificar los objetos inanimados, los vivos y a sí mismo, o simplemente comprenderlos), el sujeto trata de evitar la incoherencia y tiende siempre a ciertas formas de equilibrio, pero sin alcanzarlas jamás, excepto en ocasiones, a título de etapas provisionales: incluso en lo que se refiere a las estructuras lógico matemáticas, cuyo cierre garantiza la estabilidad local, esta realización se abre constantemente a nuevos problemas debidos a las operaciones virtuales que sigue siendo posible construir sobre las anteriores. La ciencia más elaborada sigue estando de este modo en un devenir continuo, y el desequilibrio desempeña en todos los campos un papel funcional de primera importancia, en la medida en que hace necesarias las reequilibraciones. El concepto central que parece imponerse en la explicación del desarrollo cognitivo (ya se trate de historia de las ciencias o de psicogénesis) es, por tanto, el de una mejora de las formas de equilibrio, o, dicho de otro modo, de una «equilibración maximizadora». El esfuerzo de Piaget ha consistido en buscar sus mecanismos, ya que el problema es explicar sus dos dimensiones inseparables: la compensación de las perturbaciones responsables del desequilibrio que motiva la investigación y la construcción de las novedades que caracterizan a la maximización.